"Me interesa el papel de las leyes en mejorar la situación de la mujer"

"Me interesa el papel de las leyes en mejorar la situación de la mujer"

Kate Bedford, profesora de la Universidad de Birmingham en el Reino Unido, visitó Cuenca por primera vez y lo primero que la sorprendió fue el “hermoso” clima de la ciudad, ya que le habían advertido que estaría frío y nublado.

“Traje el sol”, dice con una sonrisa esta británica que ya conocía Ecuador desde los primeros años de este siglo cuando vino a investigar los proyectos del Banco Mundial vinculados al género y la sexualidad en América Latina.

La visita de Bedford a la UDA estuvo auspiciada por el Institute for Global Innovation (IGI) de la Universidad de Birmingham https://www.birmingham.ac.uk/research/global-goals/igi/index.aspx  como parte de las actividades que se desarrollan en el subtema de Igualdad de Género dentro de las investigaciones del Instituto. 

En Campus la entrevistamos antes del taller compartido con los docentes de la Escuela de Derecho y comenzamos por preguntarle por los proyectos académicos en los que está involucrada en la actualidad que la trajeron a Ecuador.

Estoy trabajando en un nuevo proyecto género y leyes, estoy interesada en el papel que juegan las leyes en mejorar la situación de la mujer en los países en desarrollo.

Sin embargo creo que la brecha entre lo que la ley dice que debe pasar y las experiencias de distintas mujeres en la vida real existe en todas partes, en diferentes niveles y con distintas clases de mujeres.

Uno de los temas que estudiamos es el acceso a la Justicia que tienen las mujeres pobres, esto es particularmente interesante de estudiar en los países en desarrollo, en particular en situaciones donde no existe este acceso público al sistema legal.

Actualmente, cuando los medios de comunicación publican noticias sobre las mujeres y el sistema judicial, los casos más resonantes giran alrededor de los abusos sexuales, el acoso, la violación, pero no siempre la relación entre la mujer y las leyes debe ser analizada desde ese punto de vista.

No, mi trabajo está más enfocado a temas como los derechos a la propiedad, problemáticas que no suelen estar tan identificadas como exclusivamente femeninas.

Por ejemplo, tomemos el caso de cómo se distribuyen las licencias para el comercio callejero, y cómo eso afecta a mujeres y a hombres. En muchos países es más difícil para las mujeres acceder a este tipo de licencias y esa es una injusticia relacionada al género. Quizás no está marcado como un tema de género pero obviamente tiene consecuencias en las mujeres.

Cuando uno mira en estos mecanismos legales que son considerados menos relevantes, éstos en general tienen una importancia fundamental en el día a día de la gente de pocos recursos.

Otro de las áreas de interés para su trabajo es el juego y las apuestas. ¿Guarda esto alguna relación con los estudios de género o no tiene ninguna en absoluto?

A mí me interesan los estudios en política y economía y las apuestas son un tema central en estos debates, porque nos ayuda a entender cómo se puede crear una esfera legítima de inversión productiva y al mismo tiempo una esfera ilegítima de juego ilegal. Esta distinción es históricamente relevante, en especial cuando uno estudia el capitalismo.

La mayor atención en los estudios sobre el juego está enfocada en las formas espectaculares de apuestas, como los casinos. Pero yo estoy más interesada en lo cotidiano, como el bingo, y este tipo de juego es particularmente atractivo para las mujeres de la clase trabajadora.

Entonces sí existe una relación, porque en tres de los cuatro casos de estudio que he investigado las mujeres están más atraídas a este tipo de juegos de apuestas.

¿Cuáles son las expectativas que tiene usted con respecto al encuentro que tendrá con docentes de la Universidad del Azuay?

Voy a conversar sobre métodos sociojurídicos y metodologías cualitativas, y de las lecciones que he aprendido sobre estos temas en mis investigaciones.

Espero con ansias escuchar sobre las experiencias de los asistentes. Lo que ellos piensan sobre las ventajas, las limitaciones, las posibles barreras y los desafíos de utilizar estas metodologías interdisciplinarias.

Cuando hablamos de métodos cualitativos nos referimos a sumergirnos más profundamente en determinadas situaciones. Los métodos cuantitativos se basan en números, pero lo cualitativo recurre a narrativas, discursos, archivos, entrevistas, observación en el terreno, incluso etnografía.

En el aspecto legal, los métodos cualitativos se orientan a la necesidad de estudiar la ley en relación a cómo ésta es experimentada por la gente, más que simplemente a cómo es expresada por los jueces y entendida por los abogados.