UDA destaca en el reto de Company Game
La Escuela de Ingeniería en Producción participó en el reto que de la plataforma Company Game en el transcurso del ciclo marzo-julio 2019, en el que lograron posicionarse en el decimotercer puesto de doscientas universidades a nivel internacional.
Company Game es una plataforma virtual que ofrece una experiencia realista de formación empresarial mediante la simulación en distintos ámbitos académicos y grados de dificultad. Esta herramienta ha permitido crear una nueva forma de aprendizaje que consolida los conocimientos adquiridos en las aulas a través de la aplicación práctica.
El ingeniero Sebastián Suárez, docente de la Escuela de Ingeniería de la Producción, se enteró de la iniciativa y decidió formar un grupo de estudiantes que, según su criterio, pudieran estar a la altura del reto.
Así el grupo fue conformado por: Verónica Guillén, décimo ciclo, Vanesa Rodríguez y Sebastián Íñiguez del octavo ciclo.
En esta ocasión, los estudiantes decidieron participar en la rama de negocios, ya que es el hilo conductor de su formación profesional, y compitieron con más de 600 universidades de Iberoamérica.
Durante la simulación tomaron decisiones sobre negocios, marketing, producción, finanzas y logística internacional.
Suárez comentó que después de la primera fase de las simulaciones, lograron pasar a la segunda etapa, ocupando el doceavo puesto de las doscientas universidades restantes que seguían en el concurso.
Para la segunda etapa la dificultad se incrementó en gran medida, puesto que la toma de decisiones involucró temas de logística internacional, préstamos a largo y corto plazo, indicadores macroeconómicos del producto interno bruto, la variación del costo del petróleo, entre otros.
“Este simulador toma en cuenta muchas variables y factores, por lo tanto, se dificulta la toma de decisiones e incluso puede llegar a ser estresante, pero agradezco la oportunidad de haber participado, porque me ha brindado una nueva perspectiva de cómo suceden las cosas en la práctica”, dijo Vanesa.
Asimismo, Verónica recalcó la importancia de llevar la teoría a la práctica y cómo esta experiencia ha contribuido potencialmente a su aprendizaje: “Por ejemplo, hemos aprendido que la publicidad, que muchas empresas cuencanas consideran un gasto, son una inversión que trae muy buenos frutos para el desarrollo de la empresa”.
A pesar de ser la primera experiencia con el simulador, los estudiantes lograron llegar a una tercera etapa en el juego. En esta etapa la dificultad se incrementó aún más, ya que el nivel era muy exigente, compitiendo incluso con estudiantes de posgrados y maestrías.
“Hemos simulado logros estratégicos y tácticos durante todos los períodos. Prácticamente hemos tenido en nuestras manos dos empresas y hemos tomado decisiones de millones de dólares… ¡Nunca lo hubiera imaginado!”, relató Sebastián.
Tanto el docente Sebastián Suárez, encargado de direccionar a los estudiantes, como Vanesa, Verónica y Sebastián, están convencidos de que los logros se deben principalmente al trabajo en equipo, al liderazgo, al consenso de las opiniones y propuestas de cada uno, ya que durante los procesos de simulación se han reunido alrededor de ocho horas a la semana.
“Estuvimos en la misma aula sin pensar en lo que podíamos llegar a lograr si nos uníamos por un propósito en común”, afirmó Sebastián.
El ingeniero Suarez indicó que los premios que ofrece la plataforma son becas estudiantiles en Europa para los estudiantes y para la universidad licencias de un año gratis para llevar la experiencia a las aulas.
Por lo tanto, motivó todos los estudiantes que conforman la Universidad del Azuay a afrontar el reto, ya que esta experiencia les ha brindado enseñanzas en el ámbito académico, profesional y personal. Es un método alternativo de aprendizaje que involucra al máximo a sus participantes y enciende el espíritu competitivo tanto de los estudiantes como de docentes.
La invitación también fue dirigida a los docentes, para adoptar una forma de enseñanza que va más allá de los métodos tradicionales.
