Día Internacional de la Educación

El 24 de enero se celebra el Día Internacional de la Educación, fecha importante que nos invita a conocer el papel fundamental que la educación juega en el desarrollo de las personas y las comunidades.
Este día, establecido por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2018, busca reconocer el derecho de todos a una educación inclusiva, equitativa y de calidad. La Universidad del Azuay, con su modelo educativo profundamente humanista, pone en el centro de su actuar a los estudiantes y enfatiza en el cuidado de la formación profesional y humana.
Ximena Vélez, subdecana de la Facultad de Filosofía y Ciencias Humanas de la Universidad del Azuay, menciona que en un mundo en constante cambio, el profesorado debe estar preparado para adaptarse a nuevas realidades y recursos. Es así, que la formación continua de los educadores es crucial para asegurar que los estudiantes reciban una educación de calidad, explicó Vélez, haciendo hincapié en que la innovación pedagógica debe ir de la mano con la actualización profesional.
Otro tema fundamental en el ámbito educacional, es el uso de la tecnología en la educación, resaltó Vélez; las herramientas digitales son cada vez más prevalentes y la tecnología debe ser vista como un aliado del aprendizaje.
A medida que la tecnología sigue transformando el panorama educativo, es fundamental que en las universidades se implementen estrategias que preparen a los estudiantes para un mundo cada vez más digitalizado y globalizado, sin perder de vista la esencia humana.
En este contexto, Vélez comentó que la Universidad del Azuay fomenta la internacionalización, proporcionando a los estudiantes la oportunidad de interactuar con otras culturas y aprender de diversas perspectivas.
Innovación, Sostenibilidad y Adaptación: el futuro de la Educación Superior
Las universidades deben incorporar una visión ecológica y social en la formación de sus estudiantes. El cambio climático es una realidad urgente, y la educación superior tiene el deber de preparar a los futuros profesionales para que sean responsables tanto con el medio ambiente como con la sociedad, señaló Vélez.
El bienestar emocional de los estudiantes también juega un papel clave en el ámbito educativo; la salud mental debe ser una prioridad, y se deben implementar programas de apoyo psicológico para garantizar el bienestar de toda la comunidad universitaria.
En cuanto al futuro de la educación superior, Vélez destacó que la innovación y la adaptación son fundamentales. Los trabajos del futuro serán muy distintos a los actuales, y los profesionales deberán estar preparados para adaptarse a esos cambios. La educación debe ser continua y flexible para permitir que nuestros graduados se ajusten a los rápidos avances tecnológicos y las nuevas demandas laborales, afirmó.
El Día Internacional de la Educación nos invita a reflexionar sobre el papel fundamental que juega la educación en la construcción de un futuro más justo, sostenible e inclusivo para todos. La Universidad del Azuay asume este compromiso trabajando constantemente por una comunidad activa que florece junto al arte, la cultura y la ciencia.
