El renovado quirófano móvil de la Fundación CINTERANDES

El renovado quirófano móvil de la Fundación CINTERANDES

El legado del médico cirujano Edgar Rodas Andrade sigue vigente. Ahora más que nunca, gracias al renovado quirófano móvil de la Fundación que el creó ‘Cinterandes’.

La presentación se realizó ayer en la sala de uso múltiple de la Universidad del Azuay (UDA), entidad con la que mantienen un convenio para la atención de pacientes.

A poco de cumplir tres décadas de historia, el quirófano móvil ha sido renovado, contó el presidente actual de la Fundación, Hernán Rodas Reinbach. Esta es una forma de mantener viva la memoria de su padre, el creador de esta iniciativa que fue implementada para llegar “a los más necesitados”, comentó el directivo.

La renovada unidad móvil cuenta con todos los insumos necesarios para realizar operaciones como: cirugía general, urología, ginecología, otorrinolaringología, oftalmología, pediatría y distintas complejidades.

A lo largo de su historia, recordó Rodas Reinbach, en la unidad móvil se aplicaron 8.974 cirugías, han visitado 112 comunidades en 18 de las 24 provincias y han recibido a 12.490 misiones y más de 100 estudiantes extranjeros.

A este aporte se suma el de estudiantes de la UDA, Universidad de Cuenca y de la Universidad Católica de Cuenca.

Estas cifras lo motivan a mantener el objetivo de su padre, “permitir el acceso a intervenciones quirúrgicas de calidad y sin costo a personas de escasos recursos y de comunidades distantes”. Esto, para ser un complemento de las entidad públicas de salud del país.

La Fundación se consolidó con gente comprometida como Anita Vicuña,

ductor de la unidad quien también asiste en atención y preparación de los pacientes.

En la actualidad, la unidad funciona en el campus de la UDA y está abierta para atenciones, consultas médicas e intervenciones quirúrgicas. En este espacio atienden los días martes y jueves, de 08:30 a 13:00. Además, planifican jornadas de visita en distintas provincias.

Está pendiente visitar las provincias Santa Elena, Zamora Chinchipe, Manabí y otras.

El médico de planta es Blasco Guzhñay, quien se encarga de hacer preparar a los pacientes de las comunidades. Rodas Reinbach no olvidó al principal donantepara que la renovación sea una realidad. Según contó, la persona que lo hizo es un extranjero que formó parte de una de las misiones y que “se convenció que vale la pean ayudar”, enfatizó.