Del 14 al 16 de noviembre, Brasilia será sede de la Copa Mundial Universitaria FISU de Baloncesto 3x3, y el equipo femenino de la Universidad del Azuay representará al Ecuador. Ser la única universidad del país en clasificar y estar entre las diez mejores del mundo en esta disciplina es un orgullo gigante, que refleja el talento y la fuerza de la mujer ecuatoriana en el deporte.
El equipo que llevará la Garra UDA a Brasilia está conformado por Nathalia Vicuña, Anahí Astudillo, Stephanie Narváez y Valentina Guillén. Su participación representa un orgullo nacional y femenino, demostrando que la disciplina y el esfuerzo de nuestras atletas pueden destacarse y dejar huella en escenarios internacionales, inspirando a toda la comunidad universitaria a perseguir sus metas y demostrar su fuerza en cualquier ámbito.
Viajar a Brasilia no solo representa un hito deportivo, sino también una oportunidad de crecimiento humano y profesional. Cada experiencia internacional fortalece la identidad, la disciplina y el liderazgo femenino, demostrando que la constancia y el esfuerzo colectivo abren puertas a nuevas oportunidades y aprendizajes.
Participar en un torneo internacional no es solo competir: es una oportunidad para conocer nuevas culturas, compartir con personas de distintos lugares y aprender a colaborar en contextos diferentes. Estas experiencias ayudan a mirar el mundo con otra perspectiva, a crear conexiones que pueden durar toda la vida y a fortalecer habilidades que se aplican en la vida diaria, los estudios y las relaciones con los demás.
Más allá de la competencia, el deporte es una herramienta para crecer y aprender. Practicarlo fortalece la disciplina, la colaboración y la resiliencia, y enseña a tomar decisiones, comunicarse y enfrentar desafíos con confianza. También permite conectar con otros, generar amistades y reforzar la autoestima. Probar nuevas disciplinas no solo entrena el cuerpo y la mente, sino que ayuda a sentirse más seguro, motivado y realizado, mostrando cómo el deporte puede ser un camino de autoconocimiento y superación.
Celebrar este logro también significa reconocer cómo el deporte proyecta la energía, disciplina y pasión, dejando una huella que inspira orgullo y motivación en toda la comunidad. La Garra UDA no solo refleja un logro deportivo, sino un ejemplo de cómo la disciplina ecuatoriana puede proyectarse con orgullo y generar una gran celebración en la comunidad.
