“El mejor vino del mundo”, una obra que nació en la UDA
La noche del 27 de junio se presentó la obra “El mejor vino del mundo” de la Compañía de Arte Teatral de la UDA en el Auditorio General. El preestreno se realizó a las 18:00 horas y contó con la asistencia de invitados especiales y de varias autoridades de la Universidad, mientras que el estreno se realizó dos horas después con la asistencia de varios estudiantes y público en general.
La obra fue escrita por el exestudiante de la carrera de Creación Teatral, Jordi Almeida, y dirigida por Jaime Garrido. El elenco estuvo conformado por Francisco Aguirre, Samantha Villota, Carlos Loja, Jaime Garrido, Milena Montaño y Damián Albornoz. La escenografía estuvo a cargo de Virginia Cordero, en el vestuario Silvia Zeas, en el sonido Roberto Moscoso y en iluminación Daniel Montalván.
La obra consiste en una pareja prestigiosa, los González, quienes prepararon una reunión en su casa invitando a todos los vecinos del barrio para que puedan conocer su estilo de vida dictado por “el programa”, el cual radicaba en seguir un sistema para formar parte de la sociedad. Todos los preparativos fueron dirigidos y estipulados por el Sr. Gonzales y realizados por la Sra. González con exactitud y prontitud, demostrándose a sí mismos que tienen dominio sobre cada aspecto de sus vidas.
Sin embargo, a la hora indicada solo se presentan los Suárez, o como ellos gustan llamarse, Dani y Jess. Ante tal inconveniente que los toma de sorpresa, el Sr. González se encuentra con otra realidad que intenta enfrentar fallidamente, y la Sra. Gonzales descubre que hay otro mundo más allá de lo que dice su marido.
Todo esto conducirá a la entrada de las mayores autoridades de “el programa”: el Juez y el Supremo Líder, quienes únicamente demostrarán que ni siquiera ellos son capaces de entender el mismo sistema que dicen representar e imponer, y que además esconde otros intereses muy difíciles de comprender entre los hilos que los condujeron hasta esta singular noche.
La obra tiene una crítica de cómo estamos programados en cada rol, como por ejemplo para la rebeldía o para ser un personaje preestablecido que necesita darse cuenta de la realidad en que vivimos.
El público está aparentemente en una sala de una casa, pero al final este escenario se abre al público y se da a entender que ellos son intérpretes de esta obra. Como por ejemplo, cuando el personaje del Sr. González se da cuenta de que hay gente mirándole y entra en angustia sin saber por qué hay alguien mirando, siendo también esta una metáfora de la vida sobre el qué dirán.
Jordi Almeida, dramaturgo de la obra, expresó lo siguiente: “Las ideas propuestas aquí me llenan de emoción, realmente me hace sentir mucha satisfacción y agradecimiento al permitir que esta obra se lleve a cabo. Esta obra es una demostración de oportunidad para aquellos estudiantes que en que el futuro quieran mostrar sus propuestas en escena en la UDA y la Facultad de Diseño. Ojalá esto les impulsé a las nuevas generaciones a realizar más obras diferentes y mejores”.
Además Almeida mencionó: “La obra empezó cuando yo era estudiante, salió de un trabajo de la clase de dramaturgia. La idea inicial era una reunión de conservadores y liberales, poco a poco la fui desarrollando, la presenté como trabajo de dirección, luego la presenté en la elección de rey y reina de la Facultad de Diseño. Y cuando me gradué, quise presentar acá la obra, porque quería contribuir a la Escuela de Creación Teatral y de cierta manera quería compartir con la Compañía de Teatro, pero no como actor sino de otra manera, es decir, aportar con la dramaturgia”.
“Hay algunos directores que plantean que después de ocho metros la sensación del espectador varía. Sobre todo en este tipo de obras que se necesita seguir el texto con mucha atención para que uno se conecte con los actores, sienta su energía y así pueda dejarse llevar por la obra, es por ello que decidí llevar al público al escenario para mantener al espectador cercano a la obra”, explicó Jaime Garrido, director de la obra.
“Este es un producto creado desde la universidad y ese es un factor bastante importante, porque nosotros hemos trabajado desde Ionesco, Shakespeare, Lorca y esta vez con Jordi Almeida que un paso evolutivo: proyectando al escenario lo que hicieron los graduados de la carrera”, concluyó Garrido.
Se tiene pensado programar una gira con la obra hacia la costa para que se vaya madurando y así para al regreso de clases presentar en la UDA nuevamente.
